Leyendas de Oro Guardo en los libros billetes de tren o de avión. También escribo en ellos el lugar donde los compré, cuando no es mi ciudad. Me gusta pensar en los libros como objetos. Soy hijo de bibliotecario, así que crecí aprendiendo a respetarlos: no se subrayan, ni siquiera en lápiz; no se doblan sus páginas, no se abren en exceso, no se dejan al sol.
Me ocurre lo mismo con los libros, si bien yo sigo en el mismo lugar. No los subrayo, ni los abro de par en par, ni... en fin, todo eso. Cuando compro un libro antiguo me espanta si está subrayado o mal cuidado; y sin embargo me encanta cuando aparece alguna dedicatoria en la contratapa, o me encuentro un billete de autobús o metro de algún lugar lejano en el que nunca he estado. De súbito es como mirar un avión volando de noche; como cuando se agolpan todas las posibles vidas e historias desconocidas que están en él.
Maltratar libros
No me interesa en absoluto la tauromaquia, pero el Belmonte de Chaves es uno de los libros que más he disfrutado en mi vida.
En este posteo de hace unos años, escribía cosas parecidas! https://www.instagram.com/p/COOpd3ADWF9/?igshid=MmU2YjMzNjRlOQ==
Me ocurre lo mismo con los libros, si bien yo sigo en el mismo lugar. No los subrayo, ni los abro de par en par, ni... en fin, todo eso. Cuando compro un libro antiguo me espanta si está subrayado o mal cuidado; y sin embargo me encanta cuando aparece alguna dedicatoria en la contratapa, o me encuentro un billete de autobús o metro de algún lugar lejano en el que nunca he estado. De súbito es como mirar un avión volando de noche; como cuando se agolpan todas las posibles vidas e historias desconocidas que están en él.
Saludos.